
Los diagnósticos de intolerancias alimentarias son cada vez más frecuentes.
Qué está pasando?
El ritmo de vida actual, el uso descontrolado de antibióticos, el estrés emocional, los alimentos procesados y con exceso de conservantes químicos, los viajes, los cambios bruscos de dieta, algunos medicamentos ...
Todo esto, puede inflamar el epitelio de tu intestino, desequilibrarte la flora bacteriana intestinal y en consecuencia impedir que se absorban correctamente algunos alimentos, generando síntomas cómo gases, distensión abdominal o cambios en el ritmo deposicional, ya sean diarreas o tendencia al estreñimiento.
Cuando un intestino está inflamado a nivel microscópico, es permeable, disbiótico y tiene una malabsorción intestinal, las pruebas de intolerancias alimentarias pueden dar positivas.
Quizás llevas toda tu vida comiendo fruta y siempre la digeriste bien. De repente, hace unos meses, que cuando comes fruta te hinchas y tienes la sensación de que algo ha cambiado. Vas al especialista y al realizar la prueba de intolerancia a la fructosa ésta te sale positiva, te diagnostican de intolerante y te retiran la fructosa de la dieta.
Muchos de estos casos, son lo que yo llamo falsos positivos. Tu cuerpo rechaza por ejemplo la fructosa o la lactosa y la prueba sale positiva porque tu intestino está inflamado y la flora desequilibrada. Por lo tanto, no es un positivo “real” para toda la vida.
Con un buen diagnóstico de este cuadro clínico y un tratamiento individualizado probiótico e impermeabilizante, tu intestino puede volver a su estado de salud y poco a poco tolerar de nuevo estas substancias o alimentos sin problemas. En unos meses, con el intestino ya equilibrado en muchos casos si se repiten las pruebas de intolerancia éstas se negativizan.
Cabe puntualizar, que en algunos casos sí hay intolerancias genéticas o “reales” por falta de algún enzima o por otras causas que no revierten con la estabilidad del epitelio intestinal y el equilibrio de la microbiota. Estas intolerancias, acostumbran a diagnosticarse durante la infancia o adolescencia.
Así pues, antes de retirar para siempre de tu dieta un alimento que hasta hace poco siempre habías digerido bien, piensa en la posibilidad de estar sufriendo una inflamación y/o disbiosis intestinal.
SALUD!!!!
Si tienes alguna duda puedes contactar conmigo a través de mi mail info@dranataliaflores.com
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